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La Xunta informa de que viene de arrancar la puesta en producción en la aldea modelo de Meixide, en el ayuntamiento ourensano de A Veiga, con una explotación de vacuno en extensivo. Esta figura de puesta en valor -contemplada en la Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia- abarca en este caso una superficie de 71,25 hectáreas en el entorno del núcleo de población que se busca dinamizar, distribuidas en 646 parcelas de 151 propietarios.
La puesta en producción que se acaba de iniciar en la aldea modelo de Meixide fue posible tras la resolución del pertinente procedimiento de concurrencia competitiva para la selección de la propuesta de aprovechamiento idónea para la zona. Este proceso arrancó tras la publicación de la correspondiente guía de ordenación productiva, en la que se delimitaban los usos más apropiados para la explotación de las parcelas incluidas en la aldea modelo. Asimismo, se acometieron las obras e infraestructuras necesarias para la puesta en producción, como cierres perimetrales, pastores eléctricos, refugios para el ganado, comederos, bebederos, y el acondicionamiento de caminos. También se llevaron a cabo los trabajos de limpieza en los predios que asumieron el compromiso de adhesión al Banco de Terras de Galicia.
Hace falta recordar que las aldeas modelo son uno de los principales instrumentos que recoge la Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia, junto con los polígonos agroforestales y las agrupaciones de gestión conjunta. En total, actualmente hay 19 aldeas aprobadas en la comunidad, para recuperar cerca de 525 hectáreas distribuidas en casi 8.600 parcelas de cerca de 2.200 propietarios.
Mediante estas figuras, se persigue avanzar en la recuperación de la actividad económica y social de los terrenos en situación de abandono e infrautilización, así como de los núcleos incluidos en ellos. El objetivo es fijar población y mejorar la calidad de vida en estas zonas, al tiempo que se aumenta la seguridad de las personas y de sus bienes al ejercer este aprovechamiento de las tierras de cortafuegos natural frente a los incendios forestales.
