El delegado territorial de la Xunta visita el ayuntamiento de Oímbra para supervisar actuaciones de la orden de infraestructuras turísticas

Gabriel Alén recordó que la Xunta destina en esta edición un millón de euros a ayuntamientos de hasta 10.000 habitantes para actuaciones de mejora en sus infraestructuras turísticas

El delegado territorial de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén, se desplazó esta mañana al ayuntamiento de Oímbra para, de la mano de su alcaldesa, Ana Villarino, supervisar la recuperación de un horno tradicional de interés etnográfico en Bousés en el que la Vicepresidencia primera y Consellería de Presidencia, Justicia y Turismo invirtió 30.000 euros en su rehabilitación al amparo de las aportaciones de la orden de Infraestructuras Turísticas de 2021.

A continuación, visitaron el núcleo de Vidaferre, para conocer el proyecto de humanización de la Praza Casa da Inquisición, por un importe concedido de 30.000 euros con cargo a la misma orden en la edición de 2022, y que aún no comenzó su ejecución.

El delegado territorial destacó que estas actuaciones son una muestra más de la apuesta transversal de la Xunta de Galicia por el turismo, “ya que actuamos en cuestiones estratégicas y de calado y también en aquellas más sencillas, pero que contribuyen al embellecimiento y que son muy valoradas por los visitantes”.

Gabriel Alén recordó que la Xunta destina 1 millón de euros a ayuntamientos de hasta 10.000 habitantes para actuaciones de mejora en sus infraestructuras turísticas. La orden tiene como objetivo fomentar la recuperación, la accesibilidad y la señalización de los recursos turísticos de estos municipios para consolidar la oferta turística en las zonas rurales a través de la puesta en valor de su riqueza histórica, cultural, patrimonial y paisajística.

Esta orden financia también la puesta en valor turístico de los recursos de los municipios beneficiarios a través de su rehabilitación o restauración para dedicarlos a usos turísticos, así como con la recuperación de elementos etnográficos o de la arquitectura tradicional. Además, apoya la mejora de la accesibilidad la estos recursos con la eliminación de barreras arquitectónicas y de su señalización con elementos integrados de forma respetuosa con el entorno.
El importe máximo de subvención que se abonará la cada ayuntamiento de hasta 10.000 habitantes beneficiario será del 100%, con una cuantía máxima de 30.000 euros, en el marco del Plan Camiña, orientado a la puesta en valor de la riqueza histórica, cultural, patrimonial y paisajística de estos municipios con acciones de embellecimiento, accesos, iluminación ornamental, recuperación y creación de miradores, senderos y rutas, espacios de estacionamiento de vehículos e incluso la mejora de Bienes de Interés Cultural (BIC).

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