Publicado por El oro es un metal valorado de forma universal desde que comenzó a extraerse de la tierra, hace 6.600 años. Desde entonces y hasta nuestros días se han extraído alrededor de 190.000 toneladas. Sus propiedades físicas y su rareza lo hacen muy valorado en diversos aspectos: tecnología, medicina y, por supuesto, inversión.
Como activo de inversión, el oro cuenta con múltiples ventajas con respecto a otros activos: es universalmente aceptado y valorado, en todo momento y lugar; tiene un precio establecido; y su liquidez es inmediata, ya que en caso de necesidad puede cambiarse por cualquier divisa en el momento.
En palabras de Gabriel Ruiz Ramírez, presidente de Sociedad Española de Metales Preciosos de Inversión (SEMPI), “los datos demuestran que, a lo largo del tiempo, la revalorización del oro ha sido superior a la de otros activos que sirven como alternativa, como los bonos del Tesoro, las acciones o las inversiones inmobiliarias. Es un activo universal, de liquidez inmediata y que constituye un medio idóneo para preservar el patrimonio y el poder adquisitivo”.
Precisamente, el valor del oro como medio de ahorro y protección patrimonial es una cuestión asumida desde hace siglos en países como China y la India (los dos mayores consumidores mundiales de este metal). Los ciudadanos de ambos países tienen claro, desde hace siglos, que el oro es riqueza y ahorro, por lo que es tradicional que regalen pequeños lingotes o monedas de oro en las festividades religiosas.
“Comprar oro y mantenerlo en la cartera de inversión es una sabia decisión, aunque hay que tener en cuenta que sus efectos se ven a medio y largo plazo”, señala el presidente de SEMPI, quien recomienda a los inversores que incluyan hasta un 25% de oro en sus carteras de inversión.
En cuanto a los ahorradores, “es aconsejable que tengan una parte mayoritaria de sus ahorros en oro, preferiblemente en pequeñas piezas, lingotes pequeño o monedas, que son rentables con el paso del tiempo y tienen una liquidez inmediata, en cualquier momento y en cualquier país del mundo”, apunta Gabriel Ruiz.
Según los últimos datos publicados por el Consejo Mundial del Oro, la inversión en oro físico (entendiendo como tal lingotes y monedas) en 2017 ascendió a 1.035 toneladas. De ellas, la mayor parte (464 toneladas) correspondió al Sudeste asiático, mientras que Europa consumió 188.
Dentro de Europa, Alemania fue el mayor consumidor de oro, con 106,5 toneladas. Y es que los ciudadanos alemanes son los europeos que más claro tienen que el oro es un excelente método de ahorro. Se calcula que en sus manos están alrededor de 8.800 toneladas de oro, lo que equivale a unos 70 gramos de metal por persona.
De hecho, los ciudadanos alemanes confían en el oro como medio de ahorro para su jubilación.
Otros ciudadanos europeos como italianos y franceses también valoran el ahorro en metales preciosos.
Según datos de GFMS-Thomson Reuters, el consumo de joyería de oro en nuestro país fue de 7,5 toneladas en 2016, cifra que se repitió en 2017. En cuanto a la inversión en lingotes y monedas de oro, según la misma fuente el consumo fue de 3,7 toneladas en 2016 y 3,6 toneladas en 2017.
El suministro de oro procedente del reciclaje en España se elevó a 17,3 toneladas en 2016 y alrededor de 17 toneladas en 2017.
En cuanto a las reservas de oro en poder del Banco de España, a cierre del pasado mes de mayo eran de 281,6 toneladas, lo que sitúa a nuestro país en el puesto 19 en la clasificación que publica mensualmente el Consejo Mundial del Oro. Unas reservas que representan el 17% de las reservas totales en divisas del Banco de España.
Aunque todavía estamos a una considerable distancia de nuestros vecinos europeos, especialmente de Alemania, Francia e Italia en las cifras de inversión en oro, España está despertando en los dos últimos años al mundo del oro.
Buena parte de ello se debe a la actividad de SEMPI, que está realizando una labor formativa y didáctica sobre las ventajas del ahorro en metales preciosos, por medio de conferencias en diversas ciudades y la publicación de un periódico digital, Oroinformación, el único publicado en español que está especializado en esta materia.
Se calcula que en estos dos últimos años se han vendido lingotes y monedas de inversión en oro por valor de más de 35 millones de euros, de los cuales alrededor de 25 corresponden a SEMPI.
Por volumen de facturación, después de Andalucía, los siguientes mercados nacionales de interés son Cataluña, Madrid, Galicia y País Vasco.
Precisamente debido al creciente interés de los ahorradores gallegos por el oro, SEMPI ha abierto oficinas comerciales en Vigo, que se unen a las que la compañía tiene en Madrid (donde están sus servicios centrales), Barcelona, Bilbao, Cádiz, Málaga y Sevilla.
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