Feijóo destaca que en 2020 Galicia gastó todo lo necesario para luchar contra la pandemia y mantuvo su compromiso con la estabilidad presupuestaria

“El documento recoge también que Galicia lideró un año más el esfuerzo inversor de toda España”, dice

El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, destacó hoy que en 2020 Galicia gastó todo lo necesario para luchar contra la pandemia y mantuvo su compromiso con la estabilidad presupuestaria.

Según explicó Feijóo, la cuenta general de la Comunidad del ejercicio 2020, aprobada hoy en el Consello, muestra que el pasado año la Xunta fue capaz de conseguir una ejecución del presupuesto consolidado de gasto del 102,1%; un indicador que es aún mayor en el gasto corriente -del 105,8%- que engloba todo el gasto social de la Administración gallega, especialmente el gasto sanitario, educativo y el gasto del ámbito de los servicios sociales.

Asimismo, la cuenta general de 2020 refleja que la comunidad consiguió un ahorro bruto de 1.043 millones de euros, lo que permitió incrementar el grado de inversiones sin recurrir al endeudamiento.

“Y el documento recoge también que Galicia lideró un año más el esfuerzo inversor de toda España”, dijo, subrayando que somos la autonomía con mayor peso de las inversiones sobre el total del gasto no financiero, con un 13,5%, casi el doble que la media, que fue del 7,2%.

Por otra parte, la Xunta fue también un año más, la administración autonómica más ágil en el pago de los proveedores, pagando en una media de 18,7 días, es decir, la mitad de tiempo que el conjunto de comunidades, que se situó en los 34,5 días.

Hace falta destacar que la comunidad gallega liquidó el pasado ejercicio con un déficit del 0,1% del PIB y con un diferencial de deuda con la media autonómica, de 7,2 puntos. De hecho, fue la tercera CC.AA de régimen común con menor endeudamiento, con un 19,9% de ratio deuda/PIB, frente al 27,1% de la media.

Desde 2008, Galicia es la autonomía con menor aumento de volumen de deuda, y esta reducción de la ratio de deuda en los últimos ejercicios hace que esté en una mejor posición financiera para responder a las exigencias económicas derivadas de los efectos negativos del coronavirus y para impulsar la reactivación.

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