El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, presentó hoy la Agenda Gallega de Capacidades para el Empleo como una hoja de ruta para sincronizar la oferta con la demanda de puestos de trabajo; “un puente entre el mercado laboral y las personas desempleadas y los trabajadores”, abundó.
Ante unos tiempos marcados por la transformación, en los que la tecnología y la digitalización vinieron para quedarse; donde miles de puestos de trabajo se modernizarán, otros nuevos aparecerán y otros desaparecerán; y los profesionales estarán abocados a una actualización continua de sus aptitudes, Feijóo aseveró que “o evolucionamos o nos quedamos atrás”, incidiendo en la apuesta de la Xunta por dar un nuevo impulso a la formación laboral en la Comunidad.
Un compromiso, subrayó, reflejado en unos presupuestos expansivos de 380 millones de euros que dedican: casi 52 millones para el Plan emplea juventud; 35,5 millones para las personas con discapacidad o en riesgo de exclusión social; 33,4 millones para el Plan emplea mujer; y 16 millones para favorecer la conciliación. “Y un compromiso sin precedentes por la formación para el empleo que se sustancia en 185 millones de euros reservados solo por la Consellería de Empleo e Igualdad en las cuentas autonómicas”, añadió.
La Agenda Gallega de Capacidades para el Empleo tiene como objetivos formar a los trabajadores para una economía en transformación, a través de itinerarios modulares y competencias transversales; reforzar la implicación de los agentes públicos y privados, incluidas las pymes y micropymes; y crear una bolsa de trabajadores preparados para desempeñar las funciones que pilotarán el crecimiento de nuestra economía en las próximas décadas.
Asimismo, precisó que esta agenda se abrirá, a partir de ahora, a las conclusiones de las mesas de trabajo convocadas, con la previsión de ponerla en marcha de manera definitiva en primavera de 2022. Todo ello con el fin de dar un impulso a la formación de los colectivos vulnerables para que puedan encontrar su oportunidad; relanzar la capacitación de los trabajadores que modernizarán sectores con un fuerte arraigo como la construcción, el turismo, la hostelería y el comercio; preparar a los trabajadores de la economía azul -pesca, naval, renovables marinas-, de la economía verde -forestal, agroalimentario y renovables-, de otras industrias tractoras -automoción, aeronáutico y metalúrgico- y del sector de la logística; y relanzar puestos de trabajo vinculados a la economía digital, el sector de las TIC y a la transformación de las pymes.
En esta línea, recordó que en paralelo la esta hoja de ruta, la Xunta está desarrollando otras iniciativas, como: la modernización sin precedentes del Servicio Público de Empleo, a través de la modernización de las oficinas y con un nuevo software de gestión que cruza los datos disponibles para ser más eficaces; el Campus Virtual, que abarca la oferta formativa de 1.000 centros y aspira a llegar la 15.000 alumnos cada año; y la apuesta por la formación específica a colectivos prioritarios como desempleados o mujeres del rural.
Una transición energética justa y una regulación laboral que se aborde con rigor
Después de referirse también a la apuesta de la Xunta por el diálogo -en este mandato el Gobierno gallego lleva activadas cerca de 40 reuniones en el marco del Diálogo Social, 27 de ellas solo en este 2021-, Feijóo aprovechó el acto para demandar nuevamente una transición energética justa que no ponga en la picota 16.500 empleos de la industria gallega. Además de pedir que la regulación laboral se aborde con rigor, “construyendo la salida de esta transición mundial que estamos viviendo las economías occidentales”, dijo, incidiendo en que la Xunta no puede compartir una política económica basada en mayor rigidez laboral y en las subidas de impuestos.
Por su parte, la conselleira de Empleo e Igualdad, María Jesús Lorenzana, explicó que la Agenda de Capacidades estará centrada “en la consecución de un sistema de colocación para el empleo eficaz; en la optimización de los medios destinados a una cualificación profesional útil; y en la mejora de la estabilidad, consolidación y crecimiento de las empresas gallegas”. El propósito es “mejorar la eficiencia del emparejamiento entre la demanda y la oferta de empleo, al tiempo que se apuesta por la retención del talento de nuestra población y por la atracción del talento extranjero”, apuntó.