La necesaria reconversión del sector de la papelería a la era digital

Publicado por o día 11/12/2018 na sección de Internet

La necesaria reconversión del sector de la papelería a la era digital

Hace siglos, en la Alta Edad Media, cuando alguien quería hacer una réplica de un documento escrito, debía hacerlo de manera manuscrita. Así, los escribanos eran los profesionales que tenían por oficio copiar o escribir documentos a mano.

Con la invención en 1442 de la imprenta, a manos de Johannes Guttenberg, este oficio cambió por completo. La invención de la imprenta en el siglo XV supone para muchos el paso de la Edad Media al Renacimiento y la Edad Moderna, por encima de otros hitos como la llegada de Colón a América. Con la invención de la imprenta nace también un nuevo sector comercial, los medios masivos.

Así, la visualización de textos comenzó a ser algo cotidiano en las sociedades y el papel se convirtió en un instrumento importante, hasta el puno de que los materiales de escritura y aprendizaje se explotaron aún más a partir de la época industrial.

La imprenta revolucionó una época y dio lugar a un nuevo sector comercial, el de la papelería. En los últimos años estamos viendo cómo este sector, la papelería, que ha ido creciendo a lo largo de siglos, se enfrenta a un nuevo reto, el de la digitalización a pasos acelerados.

Las víctimas de la digitalización

Una de las principales víctimas de la digitalización es la prensa, o al menos una parte importante de la prensa, la prensa en papel. En la actualidad es difícil que un diario, una revista o una publicación en papel sobreviva. Especialmente significativo es el caso de la prensa en papel, pues a las ventajas que supone para los lectores acudir a internet a informarse de la actualidad, nos encontramos con que los periódicos no se pueden actualizar de manera constante, como sí ocurre con los portales en internet.

No obstante, la digitalización no siempre es sinónimo de extinción de una forma de negocio, así, la venta de libros en formato papel parece estar conviviendo de manera natural con los libros electrónicos, pues son muchos los aficionados a la lectura que prefieren seguir leyendo libros en papel.

La papelería, un sector que debe reinventarse

Con la papelería está ocurriendo algo similar a lo que sucede con la venta de libros. No va a desaparecer el sector como tal, sino que se va a producir un cambio en el negocio de las empresas que se dedican al papel y al material de oficina.

La gente va a seguir consumiendo papel, en cuadernos, y harán lo propio con artículos como lápices y material de oficina de todo tipo, pero el descenso de ventas es mucho más acusado en productos relacionados con la investigación y la educación escolar: libros, enciclopedias, monografías, diccionarios…

A todo esto debemos sumar la creciente preocupación de la sociedad por el consumo de recursos. El uso excesivo de plástico está despertando cada vez mayores conciencias y son millones de personas las que intentan alejar su vida de los plásticos. Buena parte del material de oficina está elaborado a base de plásticos.

La revolución que ha supuesto internet

Las nuevas tecnologías e internet no solo hacen que el sector de la papelería se reinvente por el cambio de productos a la venta, sino que también varíe la forma de negocio.

Así, el material de oficina fue en España uno de los primeros sectores que entró en el desarrollo de su negocio de manera online, favorecido por los productos de bajo coste.

Entre los productos y servicios online más demandados, los productos de papelería y material de oficina son de los más demandados. Esta circunstancia se ve favorecida por los precios bajos y las entregas rápidas que ofrecen los ecommerce, que posibilitan la llegada de los productos a los clientes en plazos de 24 o 48 horas.

A todo esto se suma que internet para el sector de la papelería no es un escenario en el que los pequeños negocios no puedan competir, todo lo contrario. Los pequeños ecommerce, favorecidos por fórmulas de negocio como el dropshipping, pueden competir con grandes gigantes del sector incluyendo grandes catálogos d eproductos de todo tipo: material de oficina, material escolar, productos de arte y manualidades, electrónico de oficina, consumibles, productos de papel, sección de regalos, etc.

La papelería debe reinventarse, y en ello está. Ya no funcionan en este sector las mismas fórmulas que las practicadas hace décadas, pero sigue habiendo esperanzas para esta forma de negocio.