La Xunta apoya cuatro proyectos artísticos ligados a la realidad virtual, a la innovación textil, a la salud mental y al patrimonio sonoro en las residencias del Gaiás

Realizarán su trabajo en la Cidade da Cultura entre octubre y diciembre con una bolsa de 8.000 euros por proyecto además de espacios, recursos y equipos técnicos

La Xunta de Galicia viene de dar a conocer los proyectos beneficiarios de la convocatoria de las Residencias Artísticas del Gaiás – REGA para este año 2022. Las propuestas seleccionadas apuestan por emplear la realidad virtual para conectarnos con la naturaleza; por investigar los materiales de desecho de la industria para la fabricación de nuevos tejidos; por abordar la salud mental y el aislamiento desde la experiencia escénica, y por impulsar la investigación y puesta en valor del patrimonio sonoro compostelano.

El director general de Cultura, Ángel M. Lorenzo, y la directora gerente de la Cidade da Cultura, Ana Isabel Vázquez, dieron la bienvenida en el Gaiás a los creadores que, de octubre a diciembre, realizarán estas residencias artísticas. Con la convocatoria de las REGA 22, la Xunta da continuidad a la ambiciosa línea de trabajo iniciada el año pasado para apoyar el talento y dar visibilidad a la creación contemporánea, en línea con los objetivos del II Plan Estratégico de la Cidade da Cultura.

En la categoría de artes visuales el proyecto seleccionado es Man verde, de la gallega Noa Rodríguez y la danesa Anna Stroe. Su trabajo se adscribe a la corriente de Arte y Ciencia y aspira a hacer un mundo más consciente de los recursos materiales y naturales que supone el uso de la tecnología. Para eso, construirán una instalación interactiva cubierta de plantas locales silvestres que guardará en su interior unos gafas de realidad virtual. Al moverse y tocar las plantas, se activaría una imagen virtual construida a través del tacto que haría visible su impacto y el intercambio de energía entre el aparato tecnológico y el medio natural que lo recobre.

Patrimonio sonoro y salud mental

Investigar, documentar y transformar artísticamente el patrimonio sonoro contemporáneo de Santiago es el objetivo de Compostela In-audita, un proyecto con el que Nacho Muñoz, compositor, artista sonoro y productor musical gallego, se hizo merecedor de la bolsa REGA 22 en la categoría de artes musicales. A partir de imágenes y sonidos específicos que recogerá en las calles y parroquias durante su residencia, Muñoz dará forma en el Gaiás a un concierto audiovisual sobre la identidad y espiritualidad de la capital gallega a través de la escucha. En la parte visual contará además con la colaboración del creador Roi Fernández.

La residencia en artes escénicas fue otorgada a la compañía de nueva creación Teatro et al., fundada por Miguel Ponce de Léon. Con el título (Z29.0) —referencia al código médico que indica “admisión para proteger al individuo de su entorno o para el aislamiento después del contacto con dolencias”—, el grupo explorará la conexión entre la incomunicación, el trauma y la represión de la memoria. Su pesquisa dará fruto a una pieza escénica que tendrá su estreno al final del período de la residencia.

Artesanía y economía circular

Finalmente, Inés Rodríguez, beneficiaria de la bolsa REGA 22 en la modalidad de diseño, propone en Refugallos crear nuevos prototipos de tejidos sostenibles a partir de residuos de sectores productivos como la agricultura, la madera o el textil, empleando técnicas y procesos artesanales. Estos nuevos materiales podrían, a su vez, ser usados en esos mismos sectores o bien en otros como la arquitectura y la decoración.

Con este trabajo, esta diseñadora gallega experimenta y ahonda en una nueva manera de pensar la artesanía, con procesos respetuosos y un producto que contiene valores no solo por su diseño, sino también por su respeto al medio ambiente y su contribución a una economía innovadora y circular.

El tribunal de valoración, que contó con la presencia de especialistas en cada una de las cuatro áreas de la convocatoria —artes visuales, escénicas, musicales y diseño— eligió las propuestas entre las 56 candidaturas que optaron a las residencias en esta edición. Cada una de las beneficiarias dispondrá de una bolsa de 8.000 euros y un espacio en la Cidade da Cultura para desarrollarse, así como de recursos y equipos técnicos.

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