La Xunta continúa hoy en Santiago de Compostela los cursos gratuitos de conducción segura de motocicletas, tras los celebrados en el día de ayer en Ferrol.
Esta formación está dirigida a todos los motociclistas, incluidos los usuarios con permiso de conducir B 3 (B más 3 corderos de antigüedad), A1, A2 y La que deseen mejorar el control de la motocicleta y conducir de forma más segura.
La jornada, que se está desarrollando en la explanada de Salgueiriños, comenzó con la formación de un primero turno a las 8.30 y finalizará a las 13.30 horas, continuando por la tarde con otro grupo, entre las 15.50 y las 20.30 horas. Cada una de los turnos tendrá un máximo de 20 alumnos.
Los participantes asistirán primero la una sesión teórica, que abarca temas como la equipación idónea, las maniobras, los tiempos de reacción o la meteorología adversa, entre otros.
El curso también incluye a la formación práctica mediante la realización de maniobras en parado, ejercicios de agilidad y equilibrio, acciones de frenazo y la realización de un itinerario completo.
Apuesta por la seguridad viaria
Esta edición formativa, que ayer comenzó en Ferrol y hoy sigue en Santiago de Compostela, continuará el 2 de octubre en Pontevedra y el 3 en San Cibrao das Viñas.
La Consellería de Infraestructuras y Movilidad le da así continuidad los cursos gratuitos de conducción segura de motocicletas puestos en marcha en el 2017 para sensibilizar en la importancia de la seguridad viaria y contribuir a reducir el riesgo de accidentes.
Con la celebración de esta edición, la actividad formativa permitirá llegar a ofrecer, en total, formación a más de 800 personas, a través de 20 cursos, repartidos en 5 ediciones.
Para llevar a cabo estas jornadas, la Xunta cuenta con la colaboración de la Unión de Moteros Europeos, Pons Seguridad Vial y la Escuela Nacional de Conducción de Motocicletas.
La seguridad viaria es una materia prioritaria para el Gobierno gallego, que está prestando especial atención a los usuarios más vulnerables de las carreteras como los peones, los ciclistas o los motoristas.
Estas medidas se completan con otras acciones más globales como la estrategia de eliminación de los trechos de concentración de accidentes en las carreteras autonómicas.