La Xunta se congratula de que el Gobierno central reconozca su deber de abonar las compensaciones a los mariscadores del Burgo y así lo recoja en el acuerdo para tramitar los pagos

El Ejecutivo gallego recuerda que defendió desde el primero momento que es el promotor de la obra quien tiene que compensar a los afectados y que incluso encargó un informe independiente a la Universidad de Santiago de Compostela que así lo ratifica
Publicado por o día 03/02/2022 na sección de Galicia,A Coruña,Mar,Xunta de Galicia

La Xunta se congratula de que el Gobierno central reconozca su deber de abonar las compensaciones a los mariscadores del Burgo y así lo recoja en el acuerdo para tramitar los pagos

La conselleira del Mar, Rosa Quintana, se congratuló hoy de la consecución de un acuerdo con el Gobierno central para el pago de las compensaciones a los profesionales del marisqueo de la ría del Burgo mientras duren las obras de dragado en el que el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico abonará las cuantías correspondientes a los afectados y la Xunta se encargará de certificar que los posibles beneficiarios son realmente mariscadores.
El acuerdo conseguido en la reunión mantenida hoy en la Delegación del Gobierno en Galicia entre representantes de la Consellería del Mar, del Ejecutivo central y de la cofradía de pescadores de A Coruña viene a reconocer lo que defendió la Xunta desde el principio, que el promotor de la obra es el responsable de hacer frente a las compensaciones. De hecho, este deber fue ratificada por un informe independiente encargado por la Administración autonómica a la Universidad de Santiago de Compostela, que certifica que se trata de una obra de interés general y de competencia exclusiva estatal.
La colaboración cerrada entre los Gobiernos central y gallego también ponen fin a la incertidumbre y al malestar generados entre las mariscadoras y mariscadores por la tardanza injustificada del Ministerio para la Transición Ecológica en aportar una solución. En este sentido, la Xunta lamenta la situación vivida de manera innecesaria por los profesionales del Burgo en los últimos meses a consecuencia de la falta de concreción, de los cambios de criterio y de la actitud mantenida por el Ejecutivo del Estado tratando de eludir sus responsabilidades.
En esta línea, Rosa Quintana recordó que el Gobierno gallego brindó en todo momento su colaboración y mostró la máxima predisposición para conseguir una solución lo más rápido posible con la finalidad de evitar perjuicios a los profesionales del marisqueo. “Ahora solo falta que el Gobierno central nos pase la documentación correspondiente para proceder con los trámites administrativos y cumplir con nuestra parte: hacer las certificaciones de las personas que podrían verse afectadas durante la realización de las obras por la paralización de la actividad, estimar los días de trabajo perdidos y el precio medio que conseguiría el producto en caso de mantenerse la actividad”, detalló la titular de Mar.
La representante del Ejecutivo gallego explicó que dieras cálculos saldrán las cantidades que el Gobierno central abonará a la cofradía de pescadores y que la entidad repartirá posteriormente entre sus socios. “Se trata de una buena noticia y esperamos que las propias mariscadoras y mariscadores sean también los que asuman los trabajos de retirada y posterior siembra del marisco que ahora se encuentra en la zona; no hay nadie mejor preparado que ellos para hacer esas tareas con el máximo cuidado”, destacó la conselleira.

Responsable de las compensaciones

El acuerdo conseguido viene a ratificar lo que la Xunta defendió en todo momento, que la administración promotora de la obra -en este caso el Gobierno central- es la responsable de abonar las compensaciones a los afectados por la paralización de su actividad, como aconteció en otros casos como la construcción del puerto exterior de punta Langosteira o las obras de la variante de Noia.
La titular de Mar confió en que, una vez cerrado el capítulo de las compensaciones, la obra se pueda desarrollar con normalidad y que la ría del Burgo vuelva a ser un espacio para disfrute de los vecinos de A Coruña, Cambre, Culleredo y Oleiros, así como del conjunto de Galicia, y el banco marisquero productivo que fue en los años 80.
La Xunta invirtió desde 2009 alrededor de 100 millones de euros en el saneamiento de la ría de A Coruña con la realización de distintas actuaciones que contribuyeron a mejorar la calidad de las aguas. De hecho, en estos momentos no existe ninguna zona con clasificación microbiológica C -lo que obliga y enviar el producto a bateas de reinstalación para su depuración natural antes de ser comercializado- en esta zona, lo que facilita el trabajo de los profesionales del mar y favorece que el marisco extraído consiga mejores precios en el mercado.