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Dentro del ámbito de las finanzas, existen múltiples instrumentos de inversión que permiten rentabilizar nuestro capital. Entre las opciones más recomendadas se encuentra invertir en fondos indexados: un instrumento que reproduce el comportamiento de un índice de referencia para mejorar el rendimiento nuestra inversión y reducir el riesgo.
¿Qué son los fondos indexados?
Los fondos indexados constituyen un tipo de derivado financiero cuyo valor depende del rendimiento de un determinado índice de referencia. La idea de este tipo de instrumentos de inversión es reproducir de manera fehaciente el comportamiento del índice de referencia, utilizando el capital colectivo de los inversores para realizar las operaciones necesarias.
De esta manera, el capital de los inversores es utilizado por los gestores del fondo para invertir en una cartera de activos compuesta por las mismas acciones que componen el fondo de referencia. Por supuesto, la idea es constituir una cartera cuyos activos se encuentren en igual proporción que en el índice y reproducir su rentabilidad.
Este tipo de fondos es una de las mejores opciones para invertir a largo plazo, ya que se trata de un activo de bajo riesgo en el que se obtiene un rendimiento medio sobre el capital invertido. Asimismo, este tipo de fondo se considera de gestión pasiva: a diferencia de lo que ocurre con los fondos de gestión activa en los que se busca efectuar operaciones más asertivas y superar la rentabilidad.
Al tratarse de herramientas de inversión de gestión pasiva, este tipo de fondos reduce significativamente el costo asociado a la administración del capital. En efecto, los gestores del fondo solo deben preocuparse por ajustar la cartera de activos para no desviarse de los valores del índice de referencia, el cargo por gestión es muy bajo.
Por qué invertir en fondos indexados
Para la persona promedio, existen muchas razones para invertir en este tipo de fondos. Por un lado, las opciones de inversión más lucrativas del mercado suelen requerir de una inversión significativa que supone un gran riesgo para la economía doméstica promedio. Por el otro lado, los fondos indexados resultan sencillos para la persona sin experiencia.
En este sentido, los fondos de este tipo disponen de una ventaja fundamental para los inversores: su riesgo es muy bajo. Si bien siempre existe algún riesgo, los fondos indexados son uno de los productos de inversión más seguros del mercado. Y si bien su rentabilidad no es tan alta, esto los convierte en una gran opción para el largo plazo.
Asimismo, gracias a su método de inversión pasiva, los fondos indexados son instrumentos de inversión muy accesibles, ya que reducen a lo mínimo el esfuerzo dedicado a la gestión de los activos y, por lo tanto, reducen también el costo de contratación del servicio. Esto permite maximizar el rendimiento del capital y mejorar su rentabilidad.
En definitiva, los fondos indexados resultan muy convenientes para la persona promedio, puesto que son económicamente accesibles y permiten obtener una rentabilidad segura a largo plazo, reduciendo el riesgo de la inversión al mínimo. Gracias a su naturaleza como derivado financiero, su funcionamiento resulta sencillo y su comportamiento fácil de supervisar.
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