Publicado por 
Arteixo (A Coruña), 3 de octubre de 2022 El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, destacó que la transformación de los accesos al polígono de Sabón, “uno de los más potentes y de los que más tiran del empleo de calidad en Galicia”, supone una muestra del compromiso de la Xunta con el progreso y bienestar de Arteixo y, en general, de toda la comarca de A Coruña.
El titular del Ejecutivo gallego asistió a la puesta en funcionamiento de las obras de ampliación y mejora de la avenida de la Diputación, a las que el Gobierno gallego destinó más de 6,3 millones de euros, y recordó que esta vía es el acceso principal a un gran centro de actividad económica y de empleo que lleva experimentado en los últimos años un pujante ritmo de crecimiento.
En el polígono de Sabón, en Arteixo, están asentadas cerca de 100 empresas que dan trabajo, cada día, a más de 7.500 trabajadores y valoró que algunas de esas compañías sean las mejores credenciales de la marca Galicia y buques insignia de la economía de nuestra Comunidad.
En su opinión, el éxito empresarial que atesora Sabón tiene su origen en la audacia de esos emprendedores capaces de llevar sus firmas por la senda de la prosperidad, un talento que se mide en la elección de este polígono como un entorno idóneo para instalar sus negocios, con unas comunicaciones privilegiadas y contando con el compromiso de unas administraciones públicas sensibles con sus necesidades.
El presidente gallego destacó el trabajo conjunto realizado entre la Xunta y el ayuntamiento de Arteixo, convencidos de la necesidad de dotar a este polígono de las mejores comunicaciones posibles y ofrecer soluciones a las retenciones que se venían produciendo en horas punta con la entrada de los trabajadores.
Además de mejorar la funcionalidad, el alcance de la actuación que hoy se puso en servicio va mucho más allá, ya que permite una significativa mejora de la seguridad vial; se inserta en el compromiso del Gobierno gallego por la ordenación y puesta en valor de nuestro territorio; y procura demostrar que un polígono industrial también puede ser un espacio público humanizado con un paisaje agradable.
“Hay que pensar en los vehículos, en todo el movimiento comercial que hay pero, también, procurar que las personas puedan disfrutar de las obras que se hacen y puedan caminar por ellas”, afirmó el presidente de la Xunta.
Rueda le auguró el mismo éxito que el de la rotonda elevada, que se puso en funcionamiento hace ocho años y que en su día supuso “una apuesta de futuro que los años demostraron que era una apuesta bien hecha, igual que esta nueva y que todas las que hagamos en polígonos industriales tan potentes como este de Arteixo”.
