El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció hoy que el Gobierno autonómico va a destinar 2 millones de euros en el 2024 a una nueva convocatoria de las ayudas dirigidas a propietarios particulares y a ayuntamientos para ejecutar actuaciones destinadas a eliminar el impacto paisajístico de viviendas privadas, edificios o dependencias públicas. “Vamos a seguir promoviendo el fermosismo” y dando apoyos para “corregir edificios mal conservados o que afean el paisaje y los entornos”, resaltó Rueda.
Será el cuarto año consecutivo que el Gobierno gallego apuesta por este programa, impulsado en 2021 por el Instituto de Estudios del Territorio (IET) —dependiente de la Vicepresidencia Segunda y Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda— y cuyas tres convocatorias anteriores tuvieron “muy buena acogida y aceptación”, indicó el presidente, que aseguró que en los últimos tres años recibieron aportaciones “1.800 particulares y 156 entidades locales”. Gracias a estas ayudas se financiaron intervenciones en más de 270 ayuntamientos, casi el 88% del total, por lo que el impacto de la medida llegó ya a prácticamente toda la comunidad.
Además, los incentivos concedidos en el período 2021-2023 suman casi 7,5 millones de euros aunque la inversión total movilizada supera los 10,5 millones teniendo en cuenta también las aportaciones realizadas por ayuntamientos y ciudadanos para completar el coste de las obras.
En cuanto a la convocatoria del próximo año, los propietarios particulares podrán acceder a incentivos de hasta 3.000 euros para mejorar la imagen exterior de sus viviendas y de otras construcciones, como muros de cierre, mientras que las entidades locales tendrán a su disposición un máximo de 40.000 euros (20.000 euros por cada línea) para actuar en edificios y dependencias destinadas a servicios municipales —línea 1— o sobre construcciones, equipaciones públicas y bienes del patrimonio etnográfico local —línea 2— que por su aspecto y deterioro actual puedan producir una distorsión en el entorno natural o urbano donde se localizan.
Las cuantías máximas previstas en ambas órdenes de ayudas permitirán cubrir hasta el 70% del presupuesto de la inversión subvencionable de forma que, en la práctica, se prevé movilizar cerca de 2,9 millones de euros gracias a la concesión de estos incentivos, que buscan incidir en la cultura del fermosismo impulsada por la Xunta a través de la sensibilización ciudadana y de la colaboración con otras administraciones públicas.
Además, tal y como explicó Rueda, se prevé que gracias a los 2 millones de euros con los que estarán dotadas inicialmente ambas líneas se podrá ayudar “a más de 50 municipios gallegos y a casi 400 ciudadanos” a mejorar la imagen exterior de sus inmuebles y edificaciones.
Detalles de la cuarta convocatoria
En base a la experiencia de los años anteriores, en esta cuarta convocatoria de las ayudas para la corrección de impactos paisajísticos se seguirá apostando por la simplificación de los trámites y de la documentación a presentar, al tiempo que se agiliza su resolución.
En el caso de las entidades locales, igual que se hizo este año, los ayuntamientos que resulten beneficiarios tendrán la opción de solicitar el cobro de un anticipo de hasta el 70% de la ayuda. Esta medida facilitará el inicio y la ejecución de las actuaciones por parte de los municipios ya que en el propio momento de la resolución de la ayuda les será aprobado el anticipo.
Además, en 2024 los particulares podrán volver a gestionar sus solicitudes a través de entidades jurídicas como asesorías, gestorías o asociaciones vecinales, una medida que busca facilitar al máximo la tramitación y el acceso a los fondos consignados.
En cuanto a los tipos de intervención subvencionables, en el caso de la línea dirigida a la ciudadanía se prevé la posibilidad de actuar sobre fachadas, cubiertas y muros de cierre y, como novedad, se financiará por primera vez la retirada de elementos adyacentes a los bienes en los que se vaya a intervenir cuándo estos perjudiquen su imagen o causen algún impacto. “Por ejemplo gallineros o muros a medio derribar”, explicó el presidente.
Por su parte, las actuaciones promovidas por los ayuntamientos podrán ser obras de índole menor que mejoren el aspecto y conservación de elementos etnográficos como fuentes, lavaderos públicos, palcos de música y hórreos, o bien incidir en la renovación y final exterior de fachadas, cubiertas y muros de cerramiento de edificios municipales.
Hace falta subrayar que el paisaje es un elemento que contribuye a mejorar la calidad de vida y el bienestar de los ciudadanos ya que el entorno de las personas influye notablemente en su actividad diaria; por eso resulta clave proteger la diversidad paisajística de Galicia.
En este sentido, el objetivo final de estas subvenciones es promover una cultura de dignificación del territorio en el que la participación de la sociedad resulta clave, fomentando el cuidado de la riqueza paisajística y avanzando en la apuesta de la Xunta por el fermosismo. Además, también se desarrolla uno de los objetivos previstos en el Plan estratégico del paisaje gallego 2021-2024: realizar acciones concretas de protección, potenciación y mejora de los paisajes, así como formar, sensibilizar y educar en la materia.