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Elegir un buen calzado infantil es muy importante para el desarrollo del pie del menor. No se debe olvidar que al contrario de lo que pasa con los adultos, el pie de un niño se encuentra en constante evolución, y un mal calzado puede perjudicar en la formación pie, dado que pasan muchas horas al día con los zapatos puestos.
Cada etapa en el desarrollo de un niño tiene sus propias características. Cuando comienzan gatear es necesario que el bebé sienta los pies libres, para poder amoldarse al terreno. Al empezar a dar los primeros pasos es esencial optar por un buen calzado ergonómico, que proteja sus pies y le favorezcan su desarrollo. La puntera del zapato debe estar reforzada, manteniendo la flexibilidad en la suela, esto permitirá libertad de movimiento y a la vez tendrá el pie sujeto evitando así posibles torceduras.
¿Qué materiales son más recomendables?
Los expertos coinciden en usar materiales blandos en el empeine y en la suela, garantizando así la máxima flexibilidad sin perder agarre. Deben estar fabricados por tejidos transpirables, pues los niños tienen a moverse mucho y por tanto a sudar, si el zapato no transpira puede producirle algún tipo de hongo en el pie.
Es necesario invertir en un buen calzado, pues es recomendable que los zapatos para los niños estén hechos de materiales naturales, como la piel, y suelas ligeras y aislantes como la goma.
Es lógico pensar que gastar más dinero del necesario en unos zapatos que posiblemente le duren solo unos cuantos meses, es una pérdida de dinero. Pero como ya se ha dicho anteriormente, el pie de los menores es muy delicado, pues al estar en desarrollo y ser tan pequeño, su piel es delicada y si no se elige el material adecuado este puede provocarle problemas a corto y a largo plazo.
Consejos para elegir de manera correcta el calzado de un menor
A veces puede resultar complicado acertar en la elección final. Los niños en función de su edad, se recomiendan que tengan de dos a tres pares de zapatos, no más, debido a su rápido desarrollo.
1. Reducir al mínimo el número de pares de zapatos
Como ya hemos mencionado en el texto anteriormente, a los niños les crece el pie (y todas las partes del cuerpo) de manera muy rápida. Es un poco absurdo comprarle varios zapatos por temporada, pues antes de finalizar el año ya le estarán pequeños y solo habrán usado uno o dos pares.
La manera de ahorrar, es comprar solo aquellos que necesite cuando los necesite. Deben tener un par de zapatos para el diario, unas deportivas y unos zapatos o botitas. Estos son los que deben usar todos los días. De esos dos, se procura reserva uno para que se gaste menos, pero aun así es aconsejable que no lleven siempre el mismo calzado.
Si es inevitable comprarle un tercero, ya sea por una boda, o para un acto más formal, lo mejor es decantarse por unos que pueda usar de manera recurrente para así amortizarlos después.
2. Comprar zapatos de calidad
Es comprensible pensar, que los zapatos al quedarse rápidamente pequeños, lo mejor es optar por modelos baratos. Pero eso es totalmente falso, los más pequeños necesitan calzado de buena calidad, al menos uno por temporada. Este zapato debe ser al que más uso se le dé, pues sus pies son muy delicados durante la etapa del crecimiento y necesitan transpirar y que no les haga rozaduras ni daños.
Es importante que mientras el pie aún está en fase de formación, los zapatos sean ergonómicos para proporcionarles un buen desarrollo del mismo.
3. Zapatos que se adapten a las necesidades del menor
Los adultos no suelen tener en cuenta las circunstancias en las que se desarrolla un menor. Se suelen comprar zapatos bajo la preferencia del responsable del niño, sin tener en cuenta que quizás ese modelo no es el más acertado para él.
Lo mejor es comprar zapatos que tengan sujeciones de “velcro” en vez de por cordones, esto facilitará que sea el propio chico, el que pueda ponérselos y quitárselos cómodamente sin tener que depender de nadie.
En cambio una vez ya sean un poco más independientes y hayan aprendido a abrocharse ellos solos los cordones, existen en el mercado una gran variedad de zapatillas y sneakers, con modelos mucho más casuales y adaptados a todos los gustos.
4. Optar por zapatos de verano que tengan cierre.
Los niños no paran quietos y es por eso que buscar zapatillas, sneakers o bambas para la primavera y el verano, son una buena opción. Al estar hechos con materiales más ligeros, permiten más transpirabilidad y además como van sujetas al pie se evitan posibles lesiones. Son modelos muy populares actualmente que se pueden encontrar en las tiendas en diferentes colores, formas y tejidos.
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