Vuelve el verano y empiezan a subir las temperaturas del nuevo. Nuestra piel, sobre todo nuestro rostro, es el primer afectado, y conviene tomar todas las precauciones para evitar determinados problemas.

Sin más preámbulos, te damos algunos consejos que te pueden servir.

Tips para proteger nuestra cara del sol

Correcta elección de gafas de sol

No solo debes elegir unas gafas de sol que casen con tu estilo, si no que te deben proteger debidamente del sol.

Primeramente, habrá que elegir gafas con categoría de filtro adecuada (las de cat 0 son prácticamente incoloras, mientras que las de cat 4 son muy oscuras).

También deberías considerar si vas a hacerte con unas lentes polarizadas; debido a su construcción, nos darán un mejor contraste y definición, evitando la luz reflejada.

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Cremas para la cara

Llevar una dieta equilibrada incentivará la producción de colágeno, componente clave que protegerá la piel de los nocivos rayos del sol. Ahora bien, hay que tener en cuenta que es complicado que llegue con la abundancia suficiente a todos los rincones.

Por ello, es importante complementar la nutrición con cremas ricas en colágeno. Lograrán cuidar tanto la composición, como la frescura y el aspecto de la piel.

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Protectores solares

La gran mayoría de nosotros no sabemos escoger correctamente un protector solar; solemos pensar que se tratan de productos que se adaptan a cualquier tipo de piel, como una especie de comodín.

Habrá que considerar el nivel de exposición solar y nuestro tipo de piel.

Además, por mucho protector que nos echemos, los expertos no recomiendan tomar el sol en las horas puntas (que será desde las 12:00 hasta las 16:00 más o menos). También conviene recortar que la crema solar se irá perdiendo progresivamente (en especial, si nos bañamos), por lo que conviene renovarla después de cada baño y por cada 2 horas de exposición al sol.

Buena hidratación de piel -> Mascarillas

Los rayos del sol UV tienen la particularidad de poder acceder a las capas más bajas de la piel, llegando a la capa hidrolípida, que es dónde se mantiene la humedad. Afecta a la misma, afectando a la hidratación. El resultado será la presencia de una piel mucho más envejecida.

Para evitar esto, debemos encontrar la mejor manera de aplicar hidratación a la piel y aquí es dónde podemos usar mascarillas.

Podemos probar a hacernos alguna mascarilla casera, como aquellas en las que el aguacate, la miel o las fresas son las principales protagonistas.

Y no solo es importante hidratarse, si no que también será crucial que mantengamos una buena limpieza en el rostro, y que nos desmaquillemos cada noche.

Sigue estos consejos y podrás proteger tu piel del sol.