Cada vez son más las personas que deciden utilizar el Aceite de CBD para el día a día, especialmente por los beneficios que este tiene para la salud. Sin embargo, algunos usuarios pueden sentirse confundidos sobre el uso de este tipo de aceite de forma efectiva y segura.
Si tienes dudas sobre cómo incorporar el aceite de CBD en tus rutinas diarias, te invito a que sigas leyendo porque aquí encontrarás toda la información necesaria al respecto.
¿Qué es el aceite de CBD?
El aceite de CBD también conocido como Cannabidiol, es un compuesto natural que proviene de la planta de cannabis. Sin embargo, el CBD no tiene efectos psicoactivos como puede tener el THC, por lo que no tendrás ningún tipo de efecto alucinógeno.
Es extraído de las flores y hojas de la planta de cáñamo y se diluye con un aceite portador que puede ser de coco o de semilla de cáñamo.
¿Cómo se puede usar el aceite de CBD?
Este aceite está disponible en diferentes presentaciones, incluyendo tanto aceites tópicos como aceites comestibles o en cápsulas. Una de las formas más efectivas de consumir este tipo de aceite es mediante la toma por vía sublingual.
Simplemente se deben poner unas gotas debajo de la lengua y mantenerlas de 30 a 60 segundos antes de tragar. Esto permitirá que el aceite se absorba de una forma muy rápida gracias a las membranas mucosas de la boca y después se terminará de absorber en el tracto gastrointestinal.
¿Qué dosis se debe utilizar?
La dosis que se utiliza de aceite de CBD es diferente para cada persona, porque los factores como el peso, la tolerancia o la dolencia que se trate pueden afectar la dosis a utilizar. Lo más recomendable es comenzar por dosis bajas, de esta forma se puede ir ajustando según sea necesario.
Sin embargo, siempre puede ser recomendable consultar con un profesional de la salud para que te pueda dar recomendaciones personalizadas respecto a este tipo de aceites. Evita iniciar con dosis altas, y ajustarla poco a poco para conseguir la menor dosis efectiva posible.
¿Cómo lo incorporo en mis rutinas diarias?
La verdad es que incorporar el aceite de CBD en tus rutinas diarias resultará increíblemente sencillo. Puedes tomarlo en la mañana con el desayuno o en la noche antes de acostarte para conseguir los efectos deseados.
Lo más recomendable es tomarlo todos los días a la misma hora porque sus efectos son acumulativos con el tiempo. Es recomendable que registres cómo te sientes cada día y así podrás ir ajustando la dosis según sea necesario.
En caso de que vayas a utilizarlo de forma tópica tendrás que aplicarlo directamente sobre la piel. Esto permite aliviar el dolor muscular, inflamación e incluso afecciones típicas de la piel como el acné, simplemente debes masajear una pequeña cantidad de aceite en la zona afectada y dejarlo absorber.
Antes de utilizar el aceite de CBD, deberías consultar con tu médico, en especial si tomas otros medicamentos para evitar cualquier tipo de interacciones medicamentosas.