La contaminación del suelo más presente que nunca tras la llegada del Coronavirus

Publicado por o día 29/04/2020 na sección de Coronavirus,Medio Ambiente

La contaminación del suelo más presente que nunca tras la llegada del Coronavirus

Parece mentira que todavía en pleno siglo XXI tengamos que explica que la contaminación del suelo es tanta, que en muchas ocasiones, pasamos decenas de meses sin estar en contacto con el verdadero corazón de la tierra, debido en la mayoría de casos por las largas extensiones de carreteras, aceras y construcciones de edificios.

Esta contaminación del suelo es todavía mayor en ciudades donde al convivir una mayor población, los espacios en los que la tierra puede llegar a ser visible son tan pequeños como cuadrados donde se plantan árboles para dar oxígeno a unas grandes urbes que hace décadas se han quedado sin ella.

Por suerte, aunque cada vez más pequeña parte de la población, aún dispone a pocos metros de sus casas desde montañas, praderas o playas y acantilados que le permiten reencontrarse con los latidos de nuestro increíble planeta tierra.

La llegada del coronavirus parece haber traído consigo no solo un gran número de fallecidos, pacientes curados con temor a recaer y un desastroso presagio para la economía futura y ya presente, teniendo en cuenta los muchos autónomos que han tenido o siguen con sus puertas cerradas sin poder vender, sino que también, y es triste que llegue así, un alivio para nuestra atmósfera debido a la descontaminación que estamos viendo con personas que desde sus casas, siempre han visto desde bien pequeños un fondo gris, y ahora ven paisajes montañosos.

El coronavirus ha traído consigo una disminución considerable tras el parón industrial y esto permite que podamos disfrutar de un aire más puro, si bien, la obligación de confinamiento no lo hace posible y lo más penoso, es que cuando se retome la actividad, no habremos aprendido nada y volveremos a contaminar nuestras ciudades y esta contaminación del suelo con la que comenzábamos al principio y que muchas veces ignoramos, teniendo presente solo la del aire y agua, también volverá ver como menguan sus kilómetros cuadrados con nuevas edificaciones, infraestructuras y más y más autopistas, autovías y carreteras nacionales.

¿Imprescindibles? Quizá no, pero una mayor concienciación y menor impacto, trabajando todos en la misma dirección sin colores políticos por cuidar nuestro planeta ya no solo para nosotros, sino para futuras generaciones, no es una idea, sino una obligación que todos, deberíamos empezar a actuar en consecuencia.

El caso es que el coronavirus parece que no se irá tan pronto como deseamos y además de la desinfección de manos y evitar tocar boca, nariz y ojos, así como utilizar máscaras de protección, debería ir acompañado de una buena descontaminación del suelo, siempre teniendo en cuenta que estos productos también sean respetuosos con el medioambiente y es que proteger tu vida, no es sinónimo de desproteger el planeta.