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El conselleiro de Mar, Alfonso Villares, participó esta mañana en una reunión de trabajo entre representantes de las cofradías de las zonas VIII (Cedeira) e IX (A Mariña) con técnicos de la delegación territorial del departamento de la Xunta en Celeiro e investigadores del Centro de Cultivos Marinos de Ribadeo, dependiente del Centro de Investigaciones Marinas (CIMA). Con este encuentro se pretende avanzar en el desarrollo en conjunto de una nueva acción de investigación que pretende aumentar la producción de ejemplares de erizo de mar en la costa lucense e introducir en las cofradías de pescadores las técnicas de sementeira y de seguimiento de este recurso hasta que alcancen su tamaño comercial.
Alfonso Villares destacó la importancia de estrechar la colaboración entre el sector y organismos científicos con el fin de contribuir a la mejora de la situación de los recursos y a su gestión. En la reunión participó la delegada territorial de Mar en Celeiro, Mariña Gueimunde, y por videoconferencia el director del CIMA, Carlos Gabín. En el caso del erizo se pretende coordinar las actividades de introducción de alevines en zonas de la costa de Lugo con las cofradías y asociaciones del sector pesquero y hacer un seguimiento de los mismos en cada banco, evaluando los resultados de las diferentes introducciones en la mejora de las poblaciones.
Se espera también propiciar un incremento de los ejemplares adultos que eleve la intensidad reproductiva y que dé pie a incorporar mejores reclutamientos en medio marino. Con esta acción de investigación, se pretende conseguir que este recurso quede protegido y garantizar su disponibilidad a las organizaciones y entidades pesqueras participantes en el proyecto.
El titular de Mar constató que para las cofradías y asociaciones pesqueras de la Marina lucense el erizo es uno de los principales recursos y fuente de riqueza, por lo que debe mejorar sus posibilidad de aprovisionamiento de juveniles de esta especie, contando para eso con el CIMA de Ribadeo, cuyas instalaciones permiten realizar todo el proceso necesario para garantizarlo. Ya tienen experiencia en proyectos de introducción alevines en bancos naturales en colaboración con las cofradías de pescadores de esta zona como las de Ribadeo, San Cosme, Burela, San Cibrao, Celeiro, O Vicedo y Espasante, además de Fisterra.
De hecho, el próximo día 30 de enero está previsto que el CIMA entregue en el banco de la ensenada de Loureiro, en la parroquia de Piñeira en Ribadeo, de una partida de 4.000 unidades de juveniles de erizo de mar al colectivo de mariscadores y mariscadoras de la cofradía. La iniciativa forma parte de la acción de investigación ‘Mejora de la producción de juveniles de erizo de mar en cautividad’, código de proyecto CIMA 21/03 (Xumarou), que busca optimizar el período de preengorda de juveniles con diferentes sistemas para acortar el tiempo que se precisa para su traslado al medio natural. La actuación, que finaliza este 2024, cuenta con un presupuesto que supera los 125.321 euros distribuido en cuatro anualidades y que financia en su totalidad a Consellería del Mar.
En Galicia el erizo es un importante recurso que se comercializa en cerca de una treintena de lonjas de toda la comunidad, de Ribadeo hasta A Guarda. Según los datos preliminares de primera venta en lonja, en el año 2023 se vendieron cerca de 631.220 kilos por un importe superior a los 7,6 millones de euros.
Elevar el consumo de pescados y mariscos
Antes de participar en el encuentro en Celeiro el conselleiro del Mar se acercó a Xove, donde visitó la pescadería Barreira, que lleva más de 35 años ofreciendo pescados y mariscos a los consumidores de esta localidad de A Mariña. Alfonso Villares defendió como fundamental continuar con la promoción de los productos del mar de Galicia desde los puntos de venta, la donde llegan alimentos de la máxima calidad capturados o cultivados por los profesionales del sector marítimo-pesquero que viven de una actividad que es esencial y estratégica.
Desde que salen del océano hasta que llegan finalmente al plato hay 50.000 familias que viven de su labor de la cadena mar-industria, incluidos los que trabajan en su distribución desde las pescaderías, que merecen el máximo apoyo y que se responda a demandas que llevan reclamando desde hay más de dos años y a las que se niega el Gobierno central, como es la rebaja del IVA sobre pescados, mariscos y conservas. Un veto que el titular de Mar no entiende que se mantenga y que perjudica a los mejores y más sanos alimentos que se pueden llevar a la mesa hoy en toda Europa, concluyó Alfonso Villares.
