Lo que necesitas saber sobre la auditoría fiscal

Publicado por o día 22/07/2022 na sección de Empresas

Gracias a las inspecciones fiscales de la agencia tributaria, el estado recauda miles de millones de euros al año. Estas son extremadamente importantes, y nadie se puede librar de recibir una inspección así, y se pueden realizar en cualquier momento si se sospecha que no se ha tenido el cuidado necesario en la contabilidad.

Por este motivo, siempre es importante entender sobre la inspección tributaria, y contar con los servicios de una empresa como Kreston. Porque de esta forma, podrías estar preparado y facilitarle el trabajo al propio auditor, acelerando en gran medida la inspección.

¿Qué es la auditoría fiscal?

Las agencias tributarias tienen la posibilidad de controlar la contabilidad de los contribuyentes y de las empresas, lo cual se hace mediante visitas in situ. Estas inspecciones son las que se conocen como auditoría fiscal, y coloquialmente se conocen con el nombre de inspección de Hacienda.

Esta es una herramienta que permite controlar e inspeccionar la situación tributaria, y permite estudiar con profundidad la contabilidad de una empresa o particular. De esta forma, se conocerá la situación económica y financiera real, asegurándose de que la empresa cumple por completo con sus obligaciones tributarias.

¿Qué se inspecciona en una auditoría fiscal?

Durante este tipo de inspección, se revisarán, analizarán y evaluarán los registros contables y movimientos de dinero. Para ello, se examinan todos los documentos que puedan contener información sobre las operaciones que se han realizado durante los años fiscales que son objeto de la inspección.

En el caso de empresas, se establecerá si la empresa se acoge a un régimen fiscal específico y si lo hace legítimamente o no. También se asegurarán de que se cumpla con el censo de empresarios, profesionales y retenedores, de forma correcta, y se evaluarán todos los aspectos relacionados con IVA, IS, IRPF, entre otros.

Como se puede ver, esta es una auditoría profunda de la contabilidad que ha llevado la empresa, y que tiene la finalidad de verificar que las obligaciones contables se hayan llevado a cabo de forma adecuada. Todo con la finalidad de que se hayan respetado los principios contables y la normativa fiscal pertinente y de que los procedimientos se hayan realizado de buena fe.

Lo más aconsejable para evitar cualquier tipo de inconvenientes es que se realice una auditoría fiscal independiente aproximadamente cada 4 años. Esto puede ser muy conveniente para mantener los estados financieros de tu empresa en perfecto estado.

¿Cuáles son las causas de las auditorías fiscales?

Son muchos los motivos por los que puede llevarse a cabo una auditoría fiscal, aunque también pueden ser de forma aleatoria. Dentro de los motivos que podrían poner en alarma a la Agencia Tributaria y que suelen dar pie a estas auditorías nos encontramos con:

  • Devoluciones tributarias elevadas tanto en Iva como en retenciones o renta.
  • Desajustes que se presentan entre los modelos trimestrales y anuales.
  • Falta de la declaración de subvenciones declarables.
  • La no presentación de las declaraciones.
  • Exceso de gastos deducibles, en especial cuando estos superan a los ingresos.
  • Inactividad de una sociedad y creación de otra.
  • Solicitud de NIF intracomunitario, que pretende comprobar los datos y su necesidad.

Este tipo de auditorías se hacen con el objetivo de descubrir cualquier tipo de errores fiscales que puedan haber sido ignorados. Con la finalidad de comprobar la veracidad de las declaraciones y obtener información sobre la puesta en práctica de las funciones administrativas tributarias.

Además, se utilizan para saber si se cumplen los requisitos para la obtención de beneficios o incentivos fiscales, así como devoluciones tributarias. Básicamente se hace con la finalidad de comprobar que todo esté en orden, y se emitirá un veredicto sobre el estado de nuestras obligaciones tributarias.