Al conocer los gastos empresariales que tienes podrás aumentar el rendimiento y la productividad de tu empresa. Sin embargo, un punto importante es preguntarse cómo se calcula el precio de venta, porque este debe cubrir en gran parte estos gastos y así tener una estrategia comercial completamente sólida.
Pero, para que puedas conocer mejor los gastos empresariales, vamos a hablar de ellos y de los diferentes tipos que encontrarás. Recuerda que estos tipos de gastos se aplican tanto a negocios normales como a Ecommerce y por ello antes de iniciar tu estrategia debes tenerlos en consideración.
¿Qué son los gastos empresariales generales?
Los gastos se pueden definir como una salida o egreso de dinero, sin importar el medio por el que se realicen. Estos disminuyen el beneficio y aumentan la pérdida de la organización, motivo por el cual, deben ser cubiertos por completo con el precio de venta de los mismos.
Toda empresa debe hacer frente a una gran variedad de gastos, los cuales se derivan de la actividad que desarrolle la misma. Los gastos generales no son costes directos, pero son indispensables para que la empresa funcione.
Dentro de los más comunes están: compra de materiales, alquileres, marketing, gastos de viaje, servicios, mantenimientos y reparaciones, entre muchos otros. Estos gastos se deben controlar para lograr un equilibrio completo en tu empresa.
Tipos de gastos en una empresa
Podemos encontrarnos con 4 tipos de gastos en una empresa, los cuales pueden ser directos, indirectos, fijos y variables. Vamos a conocerlos más a fondo:
Gastos directos
Este tipo de gastos están relacionados directamente con la producción, e incluyen desde la materia prima hasta la mano de obra y materiales usados en la elaboración del producto o de la prestación del servicio. Estos se deben tener en consideración en cualquier empresa para calcular el coste de producción de cada producto.
Gastos indirectos
Estos no derivan directamente de la producción, pero si son necesarios para que se pueda dar la misma. Estos son gastos derivados de ventas, administración y comercialización de los bienes que son producidos por tu empresa.
Gastos fijos
Son los más fáciles de identificar, y son aquellos que existirán incluso si no se tuviera un modelo de negocio en la empresa. Estos gastos no dependen del volumen de producción, y dentro de los principales a considerar están:
- Gastos de alquiler
- Impuestos y tasas
- Suministros y facturas de servicios
- Servicios de empresas externas
Gastos variables
Están asociados directamente al negocio o a la producción, y aumentan o disminuyen cuando los negocios tienen mayores ganancias o pérdidas. Estos pueden ir fluctuando tanto de forma voluntaria como involuntaria, dependiendo del grado de control de la empresa sobre estos.
Dentro de los gastos variables nos podremos encontrar con:
- Costes del personal
- Materias primas
- Impuestos específicos y costes de distribución
Todos los gastos que tiene una empresa se deben controlar de una forma óptima, porque de lo contrario se podrían tener muchas pérdidas en la misma y generar un desbalance en la empresa.
¿Cómo se calculan los costes de los productos?
Ten presente que, para que se puedan calcular los costes de un producto en el mercado, se deben tener en cuenta todos los tipos de gastos que representará para tu empresa. En todo caso, debes fijarte muy bien en cada uno de los aspectos, y tus productos deben aportar un porcentaje de su precio a los gastos.
En todo caso, lo mejor es hacer uso de una plantilla para hacer el cálculo y que así esté completamente optimizado. La mejor plantilla la encontrarás en el enlace que te he dejado más arriba, para que puedas hacer el cálculo de una forma rápida.