El 99% de los ayuntamientos gallegos tendrán acceso a servicios financieros luego de la apertura en febrero de la segunda fase de adhesión al protocolo de colaboración firmado entre el Goberno galego y la Federación Galega de Municipios e Provincias (FEGAMP) y dirigido a aquellos ayuntamientos que en la actualidad aun no contaban con servicios bancarios. En esta nueva ronda, fueron cinco los nuevos ayuntamientos que se adhirieron: Castrelo do Val, Punxín, Toén, Beade y Ribas de Sil.
El director general de Política Financiera y Tesoro, David Cabañó, el delegado de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén, y el coordinador institucional de Abanca en Ourense, Mateo Alonso, realizaron esta mañana una visita al cajero de Castrelo de Valle, uno de los últimos ayuntamientos adheridos la esta iniciativa.
El objetivo de la iniciativa es lo de luchar contra la problemática que suponía el acceso a los servicios bancarios en el rural, evitar la exclusión financiera y promover que toda la población gallega, con independencia de su lugar de residencia, tenga acceso a los servicios financieros.
Así, esta actuación permite que los vecinos tengan cajeros automáticos en sus municipios; dispongan de un servicio de asistencia financiera para solucionar cualquier duda y poder contratar productos igual que en una oficina bancaria convencional; así como la oportunidad de recibir formación financiera y banca electrónica para que puedan utilizar también los servicios bancarios a través de las nuevas tecnologías.