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Miguel Corgos llamó al consenso como la única manera de disponer de un modelo estable y duradero que permita cubrir las necesidades crecientes de la población, consecuencia de la evolución de los servicios públicos fundamentales y de una población cada vez más envejecida.
El conselleiro de Hacienda y Administración Públicas explicó que en la situación adversa que vivimos en este momento, derivada de los efectos de la pandemia y su incierta evolución, el alza descontrolado de precios y la subida de los tipos de interés, es urgente reformar un sistema de financiación autonómica que está superado. Subrayó que hay una demanda general de las comunidades autónomas para hacer una reforma que mejore la financiación, la autonomía financiera y la corresponsabilidad fiscal.
Aspectos clave
Miguel Corgos citó algunos aspectos clave que el Gobierno gallego considera imprescindibles para enfrentar la tan precisa revisión del sistema. Habló así de la suficiencia financiera, que proporcione los recursos precisos para desarrollar las competencias con las que Galicia cuenta, manteniendo una correlación entre los recursos globales del sistema y el peso del gasto público gestionado por las comunidades.
Corgos se refirió también al mantenimiento del statu quo, advirtiendo que Galicia no va a renunciar al principio de que el nuevo modelo no puede ocasionar pérdidas en términos de financiación de las CC.AA. Apeló también a la lealtad institucional y pidió una mayor autonomía financiera, acompañada, eso sí, de una mayor corresponsabilidad fiscal.
Recordó también el responsable de la hacienda autonómica que Galicia lleva tiempo demandando que se considere el coste efectivo de los servicios públicos, teniendo en cuenta factores como el envejecimiento de la población para abordar de manera objetiva el coste de la prestación de los servicios. Solo la dispersión territorial en Galicia supone un sobrecoste anual de 500 M€. Otro aspecto esencial es la equidad, que debe ser tanto horizontal como vertical, permitiendo recibir recursos adicionales para garantizar el bienestar de la ciudadanía.
Miguel Corgos tendió la mano al Ministerio de Hacienda y Administración Pública y ofreció una solución consensuada, en un marco multilateral y con lealtad institucional, precisa para conseguir una revisión sensata y duradera, al margen de políticas partidistas para lograr la equidad y la cohesión territorial.
