La importancia de los cubreradiadores en el diseño de interior

Los radiadores son antiestéticos para el diseño de interior, por lo que el uso de cubreradiadores permite devolver la elegancia.
Publicado por o día 18/05/2017 na sección de Hogar

La importancia de los cubreradiadores en el diseño de interior

Los radiadores son también conocidos con el nombre de emisores térmicos. Se trata de un dispositivo indispensable en cualquier instalación de calefacción; puesto que, como su nombre lo indica, es el encargado de emitir y distribuir el calor generado por una fuente del mismo. Estas pueden ser, por ejemplo, el agua calentada por una caldera (radiadores de agua), o una resistencia eléctrica, en caso de un radiador eléctrico.

Los radiadores se extienden en todos las habitaciones de una vivienda, con el fin de cumplir su función distribuidora. Sin embargo, a pesar de su utilidad, estos tienden a aportar un aspecto poco estético a los espacios en los que son dispuestos. Precisamente para dar solución a esto es que han aparecido los denominados cubreradiadores.

¿Qué son los cubreradiadores?

Se trata de muebles que sirven para cubrir los emisores térmicos de los sistemas de calefacción, los cuales quedan expuestos en las paredes una vez distribuidos en la extensión de una vivienda.

Como se dijo, la apariencia de los radiadores es completamente antiestética, y para aquellos detallistas y amantes de la decoración, los cubreradiadores representan una opción bastante útil para devolver el toque de elegancia al hogar.

Se trata de una estructura sencilla, la cual puede ser de diferentes modelos, y que no solo cumplirá la función de cubrir el dispositivo de calefacción por seguridad y para dar un aspecto más sofisticado, sino que también su diseño podría implicar otros usos. De hecho, muchos de ellos cuentan con una repisa, sobre la cual pueden colocarse adornos, lámparas o diferentes objetos.

Estos muebles pueden ser de forja, o en cambio, elaborados a base de madera. Los primeros son muy recomendados para cubrir las chimeneas clásicas; mientras que los de madera suelen colocarse en las paredes en las que se encuentren los emisores térmicos de otros tipos de sistemas de calefacción, como los de agua o eléctricos.

Su adquisición también presenta cierta versatilidad. Se trata de una pieza de carácter artesanal, por lo que es común que los carpinteros o herreros se dediquen a la fabricación de la misma. No se encuentran tan frecuentemente en las tiendas físicas de decoración, aunque existen en internet varias páginas dedicadas a la venta de muebles de diseño, que exhiben catálogos repletos de diferentes modelos, perfectamente adaptables a los gustos del interesado.

Ventajas de los cubreradiadores

  1. La principal ventaja es la seguridad que brindan. Se trate de un radiador eléctrico o de agua, si una persona tropieza cerca de la zona en que se encuentre, al estar descubierto podría ocasionar severas quemaduras. Al ubicar un cubreradiador sobre este, la probabilidad de que ocurra un accidente de este tipo se reduce. Resulta bastante útil colocarlos en aquellos hogares en los que haya niños pequeños. También pueden ubicarse en chimeneas, lo cual impedirá que salten cenizas o brasas fuera de ella.
  2.    En segundo lugar, como ya se dijo, estos muebles pueden servir de repisa. De esta forma, se contará con un lugar adicional para ubicar diferentes objetos, favoreciendo la organización de la casa y la implementación de otros tipos de adornos.
  3. Cabe destacar, que su implementación no interfiere de manera alguna en el funcionamiento normal del radiador. Los cubreradiadores están diseñados y elaborados de tal forma que la transferencia de calor se realice de manera efectiva.
  4. Por último, el punto de la estética. Existe una amplia variedad de diseños de cubreradiadores, elaborados a modo de forja o de madera, los cuales sin duda alguna representarán un elemento distintivo y de mucha sofisticación en el recinto en que se encuentren.