¿Qué es un fusible y cómo funciona?

Publicado por o día 28/03/2022 na sección de Empresas

Qué es un fusible y cómo funciona

Los fusibles son elementos que son necesarios para conservar la seguridad en las instalaciones eléctricas. A pesar de que son un dispositivo sencillo y diminuto, son básicamente los que permiten el paso de la corriente eléctrica dentro de un circuito.

Si estos no se encuentran en perfecto estado no permitirán el paso de la corriente eléctrica al resto del circuito. Por este motivo, son elementos claves si hablamos de seguridad dentro de un circuito eléctrico, y sin su presencia simplemente no se puede tener la transmisión eléctrica.

¿Cómo es el funcionamiento de un fusible?

Los fusibles cuentan con un mecanismo de funcionamiento que es muy sencillo, efectivo y practico, estando compuesto por un filamento fino. Este está fabricado de un material metálico que es susceptible de quemarse si se produce una subida de tensión o variación.

Cuando se produce una subida de la tensión de forma repentina, el filamento se quemará y cortará de inmediato el suministro de energía eléctrica al resto del circuito. Esto hace que estos elementos mantengan a salvo a toda la instalación para evitar que los elementos del circuito puedan recibir este tipo cargas.

En la actualidad es muy común que encontremos diferentes tipos de fusibles de diferentes formas y con diferentes materiales de fabricación. Gracias a esto, se adaptarán perfectamente a todo tipo de instalaciones eléctricas logrando ser un dispositivo que es altamente eficiente en su objetivo.

¿Qué tipos de fusibles existen?

Ten en cuenta que un fusible es un tipo de material eléctrico, y se descubrió en 1774, pero con el paso del tiempo se fueron perfeccionando y en la actualidad existe una gran variedad. Estos se pueden clasificar por el tipo de material, y dentro de estos nos encontraremos con:

  • Plomo: estos son fusibles muy antiguos, y hoy en día están en desuso. Estos se suelen oxidar fácilmente por lo que en la actualidad no se utilizan.
  • Diazed: estos cuentan con una coronilla roscada que permite cerrar el dispositivo y fijarlo a la base del circuito con tornillos.
  • Cilíndricos: están fabricados con materiales cerámicos, y en su interior tienen el filamento. Estos tienen una gran resistencia a los golpes y a los roces.
  • Encapsulados en vidrio: son parecidos a los cerámicos pero su revestimiento es en vidrio. Los beneficios que tiene es que se pueden ver fácilmente el filamento y saber si este se encuentra roto.
  • Chicote: estos utilizan un filamento de metal que generalmente es de plomo.
  • Tapón enroscable: estos son cilíndricos y tienen un tapón de rosca que permite abrirlo y cambiar el filamento fácilmente.
  • NH o de cuchillas: es un sistema que consiste en un filamento introducido en una carcasa de estructuras. Estos pueden llevar percutor o no, y se usan en grandes transformadores.
  • De pastilla: son prácticamente idénticos en cuanto a materiales a los cilíndricos, pero su forma varía un poco.
  • Cartucho: estos se integran al circuito mediante presión de un soporte de metal. Estos se pueden sustituir fácilmente y se suelen integrar en las placas o circuitos pequeños.

Un elemento sencillo pero eficaz

Los fusibles se destacan por ser un elemento que es muy sencillo, pero que ha sido perfeccionado con el paso del tiempo. Estos dispositivos se destacan por ser simples y básicos, que son esenciales para cualquier tipo de instalación eléctrica y que así se pueda mantener la seguridad.

Antiguamente se utilizaba un único fusible en las instalaciones eléctricas, pero en la actualidad nos encontramos con circuitos que son muy elaborados. Estos utilizan diferentes tipos de fusibles a la vez, como es el caso de los circuitos de los coches, y cada uno controla una función, siendo elementos que aportarán una gran seguridad.