Antes de ponernos a escribir cualquier tipo de relato, estaría bien empezar identificando el tipo de narrador que vamos a utilizar. Debes plantearte si vas a contar la historia en primera, en segunda o en tercera persona, si el tipo de narrador va a ser omnisciente o si será observador, etc.

Para ayudarte a elegir el que más te conviene, sigue leyendo:

Tipos de narradores y características

Narrador en primera persona

No es tan fácil como pensar que vamos a escribir en primera persona, si no que dentro de esta categoría tenemos hasta 3 opciones diferentes:

-El narrador protagonista es aquel tipo que incluye un personaje narrador capaz de contarnos la historia tal y como la está viviendo. Es muy habitual en el género de la ficción.

-Otra opción que se nos pone a nuestra disposición es el narrador testigo; en este caso, el narrador puede estar implicado o no en la historia, aunque no papel no será tan directo como en la situación anterior.

-También es posible utilizar un narrador de monólogo interior, que nos introduce dentro del flujo de conciencia del protagonista, en sus propios pensamientos.

Narrador en segunda persona

A no ser que ya tengas un cierto dominio en el arte de la escritura, el narrador en segunda persona no es muy recomendado. La razón es que es un tanto difícil de dominar, además de apelar en todo momento al lector, lo que hace que la lectura puede ser monótona si no se sabe encarrilar de la forma adecuada.

No suele usarse para una obra completa, sino más bien para momentos puntuales.

Narrador en tercera persona

El tipo de narrador más utilizado; dentro de esta categoría tenemos hasta 3 opciones:

-El narrador omnisciente suele ser el preferido por parte del escritor. Estamos hablando de un narrador que, tal y como su propio nombre indica, lo sabe todo: tanto lo que ocurre, como lo que piensan los personajes.

-Otra opción es el narrador equisciente, un tipo de narrador que se caracteriza por centrarse en tan solo un personaje, sabiéndolo todo sobre el mismo, pero no solo los demás.

-Por último, el narrador deficiente es aquel que no lo sabe todo, tan solo se encarga de recoger los hechos tal cuál se le presenta, lo que escucha y ve en el momento de la narración. Dependiendo de lo que ocurre, el punto de vista irá cambiando.

Algunos errores que deberías evitar

• Cuidado con cambiar de narrador: Es uno de los errores más habituales por parte de los autores amateur. Por ejemplo, si empezamos con un narrador en tercera persona, debemos mantenernos fiel al mismo. Solo si tienes una cierta maestría puedes mezclar diferentes tipos de narradores sin que resulte un auténtico caos.
• No leer mucho: Leyendo muchas obras se aprende mucho sobre los diferentes tipos de escritores, y sobre cómo se deben de usar en diferentes ocasiones.
• Impacientarse: Se paciente y crea tu libro paso a paso, sin ir demasiado rápido.

Así podrás saber el tipo de narrador que más te conviene.